Gasolina

By (author): "Quim Monzó"
Publish Date: April 1983
Gasolina
ISBN8433909932
ISBN139788433909930
AsinGasolina
Original titleBenzina
Ante el telón de fondo de un Nueva York difuminado y abstracto, «Gasolina» empieza con una sucesión de ráfagas de la vida de Heribert, un pintor en la cumbre de una fama conquistada a codazos. Lo descubrimos un primero de enero, entre las sábanas del lecho de su amante, con la vaga impresión de que, además del año, ha cambiado la mirada con la que observaba el mundo. Por primera vez en la vida, pierde las ganas de pintar. Aburrido, se duerme mientras hace el amor, se pasea por cócteles y parties y descubre que Helena –que es, a la vez, su mujer y su galerista– le engaña con un pintor novato, y se encuentra desarmado a la hora de seducir a una adolescente. Mientras tanto... «Qué extrema lucidez la de Monzó diseccionando con ferocidad las mentiras del quehacer de nuestros días» (Juana Salabert, El Mundo); «Como Nabokov, Monzó tiene el virtuosismo que permite jugar a la desesperada con las palabras y el aguijón de dolor que atraviesa la máscara de los chistes más brillantes» (P. Lepape, Le Monde). For the first time in his life, Heribert Juliá is unable to paint. On the eve of an important gallery exhibition, for which he’s created nothing, he’s bored with life: he falls asleep while making love with his mistress, wanders from bar to bar, drinking whatever comes to his attention first, and meets the evidence of his wife Helena’s infidelity with complete indifference. Humbert Herrera, an up-and-coming artist who can’t stop creating, picks up the threads of Heribert’s life, taking his wife, replacing him at the gallery, and pursuing his former mistress. Heribert is finally undone by a massive sculpture, while Humbert is planning the sculpture to end sculpture, the poem to end poetry, and the film to end film, all while mounting three simultaneous shows.A fun-house mirror through which he examines the creative process, the life and loves of artists, and the New York art scene, Gasoline confirms Quim Monzó as the foremost Catalan writer of his generation.